Ardes, sed. ¡Ra!
Son meses los que me he paseado en Facebook y no he mandado a nadie los saludos debidos a quienes cumplieron años rodando en el planeta de los vivos, tal cual si para mí estuvieran muertos. Seguro es el efecto del olvido. Son tantos mis pendientes que me olvido —incluso aunque me lo recuerde Facebook—… Seguir leyendo Sextina de los vivos y los muertos
Despiertas. Oyes un sonido agudo, un como chillido. Te asomas a la ventana. Silencio. Lo oyes de nuevo, y una bandada de palomas se dispara. Silencio, y el chillido de nuevo dos veces, y las palomas vuelan en otra dirección. Entonces dices: Cuando despiertas, en el cielo resuena la cacería.
Millones de años. Tu vida. Millones de años.
A la manera de César Vallejo Para mi amigo D. P., que me obsequió el primer verso Me moriré en Callao, en Trocadero, +++buscando alguna puta que me atienda. +++Me moriré buscando la contienda +++en que mi ansia dé con asidero. Ella dirá: —Hoy eres el primero. +++Y yo: —Señora, no se desentienda, +++que a… Seguir leyendo Puta negra sobre cliente franco
Una de las características más notables de los palíndromos es su capacidad de perturbar, de revelar el sentido oculto de las palabras, como un oráculo. Por eso me quedé helado cuando, viendo por televisión la noticia de que el mexicano Édgar Tamayo será ejecutado esta tarde en Texas a pesar de una serie de objeciones… Seguir leyendo Édgar Tamayo: con la muerte en el nombre
La polilla va sin su vida por el agua.
La cucaracha, rodeada de hormigas, desaparece.
Para L. S. H., que temía a las turbulencias aéreas No temas de los vientos la estridencia cuando a tu avión remuevan y golpeen, que todo pasará: tenles paciencia. El viento sabe bien cuál es su audiencia y a todos hace que se zamaqueen. No temas de los vientos la estridencia. La calma romperán, y… Seguir leyendo Villanela para perder el miedo en los aviones
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